Equipal: asiento sólo para dioses

Hola, les comparto estos asientos únicamente para los dioses:


Icpalli se interpreta como”asentadero de reyes y reinas”. Es una palabra de origen Náhuatl que se castellanizó como equipal.

La tradición del equipal viene de un pasado mítico, teniendo su origen hace siglos antes de la conquista de los españoles, convirtiéndose en símbolo del pasado de sus usos y costumbres.

Según la historia, los equípales eran considerados por las culturas prehispánicas como tronos, asientos dignos de los dioses; materializando su importancia al ser símbolo de poder y estatus social, estaban reservados para los sacerdotes, para honrar y destacar a quien se lo merecía.

Aparecen descritos a partir del códice mendocino como asientos bajos y planos, tejidos de carrizo con respaldos altos y sin pedestal cuya posesión era privilegio de los señores.

Al indagar en el origen náhuatl de la palabra se ha descubierto que probablemente los aztecas al conquistar los diferentes pueblos de lo que hoy es México, fueron los que nos dejaron la herencia de este mueble, junto con su sentido de importancia.

Los huicholes emplean el Marakame, su equipal en forma ritual, sólo el sacerdote, el cantador de las fiestas, el jefe de la tribu y las autoridades mayores pueden sentarse en él. Conservando por siglos su cultura, continuaron con la antigua tradición de los equípales. El etnógrafo noruego Carl Lumholtz en su visita a este pueblo, en el siglo XIX describió los equípales como: “Taburete con respaldo y brazos, el cual conforme al mito representa la flor de sotol, la planta secular de prominente carácter en la tradición de los huicholes, de la que extraen el aguardiente nativo”.

Jalisco y sus alrededores son la cuna del equipal, especialmente “Tzacoalco” (lugar de águilas) a donde llegaron los aztecas en 1264, guiados por Hueman (el hombre de las manos grandes), que hoy conocemos como Zacoalco de Torres.

El equipal a estado presente en el transcurso de los siglos en humildes chozas o en ámbitos señoriales, donde los gobernantes, industriales, pensadores, y artistas gozan de su estética y tranquila presencia. Ha ido evolucionando con el pasar del tiempo, en nuestros días éste forma parte del arte popular mexicano y clásicamente está hecho con materiales de la región, como costumbre se utiliza el palo de rosa, palo dulce y carrizo planchado.



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